Outplacement

El outplacement, un término muy conocido en los Departamentos de Recursos Humanos de las empresas, es una práctica cada vez más consolidada en nuestro país, resultando fundamental para ayudar tanto a las empresas como a los trabajadores que se han visto afectados bien por la reestructuración de la plantilla, bien por los recortes en gasto debido a un bache financiero.

¿Qué es y cómo llevar a cabo el outplacement?

El outplacement es un servicio de apoyo que las empresas ofrecen a los trabajadores de los que deciden prescindir, de forma que aquellos empleados que pierden su trabajo reciban la ayuda que necesitan para volver a formar parte del mercado laboral. Así, el outplacement es un proceso de recolocación de los trabajadores despedidos, de acuerdo con su perfil profesional.

Este procedimiento permite que la reputación de la empresa que lo ofrece no se vea afectada tras un proceso de reestructuración del personal o por el despido de varios trabajadores y, al mismo tiempo, favorece la inserción laboral de los empleados despedidos.

Origen del outplacement

Este proceso nace en Estados Unidos, aunque hay diversas teorías sobre el momento de inicio del mismo. Las más importantes son las siguientes:

• El outplacement encontró su origen en los años 40, finalizando la Segunda Guerra Mundial. Surgió con el objetivo de acomodar en el mercado laboral a los militares que habían combatido en la guerra y buscarles un futuro profesional.
• El outplacement comenzó con la consultora Think, que ofreció este servicio a algunas empresas que tuvieron que prescindir de muchos de sus trabajadores en épocas de crisis económica.
• El outplacement nació de la idea de un headhunter, cuyo trabajo consiguió recolocar en el mercado laboral a varios centenares de investigadores de la NASA tras la reducción de los programas de investigación espacial.

Claves del outplacement: todo lo que debe analizar el outplacement

En un procedimiento de outplacement hay ciertos puntos clave que han de ser valorados para conseguir el éxito del proceso y la inserción laboral del trabajador. Son los siguientes:

• Aptitudes y capacidades del empleado despedido. Es importante llevar a cabo un análisis en profundidad de las mismas para poder identificar qué puestos de trabajo son más apropiados para el perfil profesional del trabajador que ha sido despedido.
• Asesoramiento al empleado sobre la situación en que se encuentra el mercado laboral. Para conseguir empleo resulta fundamental conocer en qué situación se encuentra el mercado laboral, cuál es su realidad. Es por ello de gran importancia que durante el proceso de outplacement se dé esta información al trabajador de forma honesta. Así pues, se deberá informar al trabajador qué probabilidades tiene de encontrar un nuevo empleo o cuánto tiempo le llevará, aproximadamente, encontrar otro trabajo.
• Fijar objetivos y metas futuros. Uno de los puntos clave de este procedimiento es ayudar al trabajador a fijar sus objetivos futuros, de forma que esto constituya una hoja de ruta que el trabajador deberá seguir para seguir con su carrera profesional.
• Asesoría psicológica. Este punto es clave para que un trabajador que ha sido despedido pueda afrontar esta peliaguda situación de la mejor manera posible, de forma que se evite que el empleado despedido desarrolle alguna dolencia mental como una depresión o ansiedad.
• Dar herramientas para la reinserción en el mercado laboral. Este punto es fundamental, pues con la aplicación de estos instrumentos, la reinserción en el mercado laboral del trabajador despedido resultará más sencilla. Así, es importante que la empresa ayude al trabajador a crear una red de contactos que puedan ayudar al trabajador profesionalmente o a elaborar un buen curriculum vitae.

¿Qué valor aporta el outplacement a las empresas?

Aunque el valor que aporta este procedimiento a las empresas es mucho, lo cierto es que hay muchas de ellas que no pueden permitírselo, sobre todo las pequeñas y medianas compañías, ya que no suelen disponer de un Departamento de Recursos Humanos. Sin embargo, al igual que ocurre con el Departamento de Recursos Humanos, el outplacement se puede externalizar, es decir, se puede contratar a una empresa externa que se encargue de llevar los recursos humanos y de llevar a cabo el proceso de outplacement cuando sea necesario.

Sin duda, el outplacement mejora la reputación y la fama de la empresa, sobre todo en tiempos de crisis. Este procedimiento de recolocación en el mercado laboral ha sido de gran importancia y utilidad a raíz de la pandemia mundial provocada por el coronavirus, a partir de la cual se ha producido miles de despidos provocados por el confinamiento domiciliario que se ha llevado a cabo para luchar contra la incidencia del virus.

Además, esta técnica de recursos humanos ayuda a humanizar los procesos de despido, haciéndolos más llevaderos tanto para la empresa como para los empleados que han sido despedidos. No solo eso, el outplacement permite aumentar las competencias y el nivel de empleabilidad de los trabajadores despedidos, lo que mejora la calidad de los trabajadores que vuelven al mercado laboral.