Marketing operativo

Si hablamos de las estrategias globales de una empresa, estamos haciendo referencia al concepto de marketing en general. En realidad, el marketing lo podemos dividir en dos secciones claramente diferenciadas dependiendo de su objetivo final.

En este apartado, nos vamos a centrar en el llamado marketing operativo o táctico. El cual busca cumplir los objetivos de ventas de la empresa a través de diversas técnicas pero siempre enfocándose en el corto plazo para conseguir incrementar los ingresos de la compañía.

Pero esta mentalidad de marketing cortoplacista, funciona guiada con una perspectiva de marketing a largo plazo que es conocido como marketing estratégico.

¿En qué se diferencia el marketing operativo del estratégico?

Como ya hemos mencionado brevemente, el marketing estratégico busca centrar su interés en los resultados a largo plazo de las campañas publicitarias de la empresa.

Las funciones que lleva a cabo la parte estratégica del marketing incluye:

• Análisis de necesidades: Busca detectar todas las potenciales necesidades que pueda tener un consumidor para crear productos que la satisfagan.
• Crear propuestas para las necesidades: Tras detectarlas con el análisis, se diseñan productos a su medida.
• Percepción de marca: Busca mejorar la imagen corporativa con todas las acciones realizadas.

En cambio, las estrategias de marketing operativo son mucho más beneficiosas a corto plazo ya que se centran totalmente en obtener resultados lo antes posible. Este tipo de estrategias son obligatorias para que toda empresa siga funcionando ya que sin ventas, no hay capacidad de maniobra ni se puede funcionar.

A modo de resumen:

El marketing operativo busca realizar acciones inmediatas mientras que el marketing estratégico analiza y estudia los diferentes campos de acción que puedan afectar a la empresa sin tomar acciones prácticas. Funciona a nivel teórico.

La publicidad operativa trabaja en el presente y busca los resultados lo antes posible, la estratégica quiere ver resultados pero puede esperar meses o años hasta verlos debido a su enfoque a largo plazo.

También interactúa directamente con los productos y los utiliza como una herramienta de venta mediante el packaging, mientras que el estratégico busca interactuar con los clientes a través de los resultados que los productos deben de tener en su vida.

¿Hay que elegir entre el marketing operativo y el estratégico?

Tanto uno como el otro son necesarios para el correcto funcionamiento de cualquier estrategia publicitaria de una manera óptima. Si bien el marketing operativo puede lograr ventas sin contar con una estrategia sólida detrás, se estaría desperdiciando un potencial enorme de esta forma.

Una empresa tiene que pensar a largo plazo, pero actuar en el corto plazo. Y esto es algo que las estrategias de marketing reflejan mediante el uso de estas dos partes de cualquier campaña de marketing bien planteada. Además, ambas partes se complementan entre sí y no tendría sentido enfocarse en una e ignorar a la otra.

Funciones y áreas de trabajo del marketing operativo

Considerando que el marketing operativo actúa enfocado totalmente en el éxito inmediato de sus acciones en el corto plazo, sus áreas de trabajo serán todas aquellas que afecten de manera directa o indirecta al éxito de las ventas en la campaña publicitaria. En general, estos son los principales elementos que están bajo el control del marketing operativo:

• Precio del producto y en oferta: Se calcula cuál será el precio que aceptarán los consumidores para comprar el producto consiguiendo el mayor beneficio para la empresa. También el precio mínimo aceptable para la empresa durante las promociones para que sea viable.
• Packaging: Diseñar un empaquetado del producto atractivo y amigable para los consumidores tendrá un impacto directo en el nivel de ventas. A modo de ejemplo, a través de las acciones de packaging se llega a la conclusión de que los productos para un público infantil logran más ventas si incluyen cajas coloridas y con dibujos. Como sucede con cereales de desayuno o mochilas de colegio.
• Políticas a nivel comercial: Estrategias para facilitar la comercialización de los productos como ofrecer descuentos aplicables o promociones temporales. Estarán gestionadas y coordinadas desde cada puesto de venta.
• Creación y gestión de campañas publicitarias: Todas las acciones de publicidad que busquen atraer la atención de potenciales clientes de la marca. Incluye acciones de todo tipo que afecten a las ventas de la empresa y acciones como Street marketing y operaciones de mailing que atraigan llamadas o visitas a la tienda.
• Acciones publicitarias digitales: Ligado al punto anterior, pero dada su presencia actual y sus bajos costes por anuncio merece una mención propia. La creación de publicidad a través de SEM se gestiona también mediante el marketing operativo al igual que sucede con la gestión de las redes sociales con promociones por parte de la empresa.
• Contacto y negociación con proveedores: Lograr reducir los costes de los productos que la empresa necesita para ofrecer a sus clientes su producto o servicio final, supondrá un incremento en los beneficios. Ya sea porque suponga poder bajar precios durante las promociones o de manera permanente, o un mayor número de ingresos si se mantiene el precio pero se abaratan los costes de producción.
• Búsqueda de clientes: Captar clientes mediante otros medios a los habituales es otra de las ramas que se encuentra bajo el control del marketing operativo. En este apartado se engloba la creación de contenido para las redes sociales o la página web de la empresa en su blog para que pueda viralizarse y llegar así a nuevos consumidores que aún no conocieran la marca.
• Crear y ofrecer productos alternativos: Cuando la empresa no tiene claro cuál es la decisión más adecuada, puede decidirse por crear más de un producto con ligeras variaciones entre todos. De esta manera, puede saber rápidamente cuál es el que más gusta a los clientes y centrar en ese modelo las acciones publicitarias siguientes.

Con todos estos elementos bajo su control ¿qué objetivos finales logra alcanzar el marketing táctico?

• Conseguir un mayor número de ventas
• Aumentar la rentabilidad a corto plazo de la empresa.
• Reducir los costes operativos con los proveedores al mínimo posible.
• Crear campañas de marketing efectivas adecuadas a las necesidades y servicios de la empresa.
• Mejorar la presentación de los productos.