Depósito interbancario

El depósito

El contrato mercantil de depósito está regulado por los artículos 303 a 310 de nuestro Código de Comercio. En esencia el depósito bancario es un contrato por el que el depositante entrega al banco una cantidad de dinero con obligación de custodiarlo (en cuanto a su valor nominal) y devolverlo al depositante en los términos que se acuerden.

Las condiciones de este depósito pueden ser muy diferentes: hablamos de depósito a la vista cuando el depositante puede disponer del dinero en cualquier momento y de depósito a plazo cuando está fijada la fecha de devolución pudiendo ser este plazo más o menos largo. Además el banco que recibe el depósito puede obligarse (o no) a pagar determinados intereses por ese dinero.

Cuando el que deposita el dinero es, también, una entidad bancaria (es decir, que un banco deposita dinero en otro banco) hablamos de depósito interbancario.

los depósitos interbancarios son una parte muy relevante del mercado interbancario.

Las operaciones bancarias

Los bancos reciben fondos de sus clientes (operaciones de pasivo) mediante estos depósitos de los que hablábamos y ese dinero lo utilizan para obtener con él una rentabilidad.

Esta utilización del dinero consiste, principalmente, en prestar dinero a otros clientes que lo necesitan (operaciones de activo), cobrándoles un interés por ello.

El dinero de que pueden disponer las entidades bancarias para poder prestarlo no es solo el de los depósitos que reciben, sino que también pueden prestar dinero realizando una anotación contable, de manera que no entregan el dinero en billetes sino que lo ponen a disposición del cliente en una cuenta a su nombre, ésto lo pueden hacer cumpliendo determinados límites en lo que llamamos coeficiente de encaje bancario con lo que los bancos están creando dinero (el llamado dinero bancario).

La capacidad que tiene el banco de disponer de dinero para prestar depende, por lo tanto, de los depósitos que tenga de sus clientes, es decir, de los depósitos que recibe. 

Como el banco está, constantemente, realizando operaciones de sus clientes de cobros, pagos, etc. estos depósitos (sobre todo los que son a la vista) están variando constantemente con lo que las condiciones para otorgar crédito varían día a día. 

Operaciones interbancarias

Para solucionar esta volatilidad de las condiciones se ha creado el Mercado Interbancario del que hablábamos antes.

En este mercado los bancos se prestan dinero unos a otros o depositan fondos unos en otro en operaciones que suelen ser a muy corto plazo (uno o pocos días); hablamos de un mercado donde todos los que comparecen mueven cantidades muy importantes de dinero, por lo que el volumen de estas operaciones puede ser muy elevado.

El mercado interbancario está regulado y dirigido por el Banco Central (en nuestro caso el Sistema de Liquidación del Banco de España, del que hablamos a continuación) y sus condiciones se fijan por éste según las condiciones de mercado (los intereses). 

Estos tipos de interés a aplicar producen efectos en otras operaciones siendo la base de determinados índices (como el Euribor). En todo caso, las condiciones de este mercado van a ser determinantes (de una u otra manera) para fijar los tipos de interés que los bancos van a acabar cobrando a sus propios clientes.

El sistema de liquidación del Banco de España

Las operaciones interbancarias (no solo los depósitos de unos bancos en otros sino también los pagos y cobros de un banco a otro para sus clientes) se realizan a través de este sistema de pagos que se realiza mediante dos formas:

• TARGET2: para los pagos de grandes cantidades.
• Sistema Nacional de Compensación Electrónica, para pagos de menor importe.

Su gestión la realiza Iberpay, una empresa privada (participada por los bancos).

En todo caso las operaciones están reguladas por la normativa SEPA en todo el territorio de la UE.