Crisis económica

Una crisis económica se produce cuando el rendimiento de una determinada economía —producción, comercio, empleo y otros sectores— cae por debajo de límites aceptables o lo hace de manera espontánea, perjudicando a todos los sectores que la componen de manera significativa.

Origen y definición del concepto

La crisis económica es un concepto de las ciencias económicas que varía en función de la corriente de pensamiento o escuela económica que aborde el tema; por ejemplo, para el marxismo clásico, una crisis económica es un estadio previsto del ciclo económico capitalista, mientras que en la economía neoliberal se trata de un evento de desequilibrio que depende de una serie de políticas monetarias que tienen poco que ver con el sistema de producción capitalista.

Pese a las discrepancias, el concepto está íntimamente relacionado con la idea del ciclo económico. Esto es, de la sucesión de distintas fases de producción, expansión y contracción de una economía a nivel global. La crisis sucede no como una de las etapas de este ciclo, sino más bien como catalizador de una de ellas; la etapa de contracción económica, en la cual la economía decrece y se contrae.

El rendimiento de la economía suele medirse con un indicador de la producción real, el Producto Interior Bruto o PIB, aunque muchos autores consideran que enfocarse exclusivamente en este indicador puede resultar una aproximación simplista del fenómeno.

Ciclo económico

El ciclo económico supone un proceso de retroalimentación que se encuentra previsto en mayor o menor medida en la mayoría de las teorías económicas clásicas. Responde al proceso de producción capitalista como motor de la economía, en tanto reconoce la necesidad de este de producir más de lo que se puede consumir. Al alcanzarse este nivel, sigue un periodo de escasez en el consumo que finalmente impide que la producción mantenga su nivel.

Las cuatro fases del ciclo económico son:

• El ascenso, en el que la economía crece.
• El descenso, en el que la economía cae.
• La recesión, en la que el descenso se prolonga por mayor tiempo del esperado.
• La reactivación, en la que la producción comienza a crecer nuevamente —y el ciclo vuelve a comenzar—.

Las crisis ocurren en algún momento de la fase de descenso y, si bien por naturaleza son macroeconómicas, ya que todos los sectores de la economía se encuentran relacionados entre sí, las crisis económicas pueden enfocarse en un sector particular para luego avanzar sobre otros. En definitiva, quiere decir que la acumulación y el crecimiento económico solo pueden sostenerse hasta cierto punto, entonces debe producirse necesariamente una retracción en la capacidad productiva.

Causas y consecuencias de las crisis económicas

Al tratarse de una recesión prolongada en la capacidad de producir bienes y servicios y su consumo por parte de una población laboral activa, existe un amplio catálogo de factores que pueden considerarse como causales de una crisis —incluso de índole no económica—; por ejemplo, en 2009, en el caso de crisis ambientales en economías principalmente agroexportadoras.

Pese a ello, existe un factor que la mayoría de los autores consideran como uno de los indicadores más efectivos; las bajas tasas de interés y el crédito barato. En este escenario, se fomenta la circulación del dinero en detrimento del ahorro, y se prefiere invertir en función de la especulación financiera. Esto produce un desajuste en la inversión real y el dinero pierde valor.

En lo que respecta a la concepción marxista de la crisis económica, esta se produce debido a la sobreproducción, lo que genera un círculo vicioso: al existir más bienes de los que se pueden vender, se deja de producir; esto quiere decir que se requiere menos mano de obra, lo que a su vez genera una caída en el consumo; dicha caída incrementa la diferencia entre la oferta y la demanda, acentuando de esta manera la sobreproducción existente, lo que genera mayor desempleo —y así sucesivamente—.

Por su lado, el enfoque keynesiano señala que la crisis económica se desencadena debido a la falta de demanda, lo que produce falta de liquidez. Sin embargo, el verdadero detonante de una crisis económica según este enfoque es la acumulación de capital frente a la demanda efectiva que se percibe por parte de la población. En efecto, el capital no tiene a donde ir y la demanda de productos y servicios se vuelve cada vez menor. En todos estos casos, la crisis marca el final de la etapa de expansión y acumulación de capital del ciclo económico y da comienzo a la etapa de contracción y recesión.

Las crisis económicas pueden clasificarse según qué sector se vea más afectado:

• Crisis financiera
• Crisis cambiaria
• Crisis productiva
• Crisis comercial
• Crisis laboral

La crisis económica es un concepto que tiene diferentes implicaciones según la corriente económica que lo implemente. Sin embargo, en general se suele coincidir en que se trata del resultado de una secuencia cíclica que se corresponde con la saturación del sistema productivo y comercial y la caída del empleo y del valor del dinero.