Cirbe

CIRBE es una base de datos que ha creado y gestiona el Banco de España, su nombre es un acrónimo de Central de Información de Riesgos del Banco de España.

Contenido de CIRBE

En esta base de datos aparecen los riesgos (las deudas bancarias) que tiene una persona (física o jurídica).

En la base de datos aparecen dos tipos de riesgos: directos e indirectos:

• Riesgos directos son todas las deudas que tiene contraídas esa persona con entidades financieras; en la base de datos aparecen cuando son de importe superior a 6.000€ en una misma entidad bancaria, es decir, una persona que tiene varios préstamos en un mismo banco que, en total, suman más de esos 6.000€ aparecerá declarada en el CIRBE.
• Riesgos indirectos se dan cuando una persona no tiene concedida directamente financiación pero sí aparece como avalista de otros; se incluyen en la base de datos cuando su importe es superior a 30.000€ por entidad.

Todas las entidades financieras están obligadas de manera periódica (mensual) a facilitar al CIRBE la información que deba ser inscrita en el fichero, para mantenerlo al día.

No es una base de datos de morosos o impagados, es una base de datos que informa sobre los préstamos y demás productos de financiación que tiene, normalmente, suscritos cada persona o empresa con entidades financieras. Sin embargo esta información, de si se produce algún impagado, aparecerá también en las consultas.

Concepto de “riesgo” de una persona

Antes de conceder financiación a un cliente (un préstamo, un crédito, una línea de descuento) el banco estudia a ese cliente y su “riesgo” para saber qué posibilidades tiene de recuperar el dinero que le está facilitando.

Este estudio comprende muchos aspectos: si tiene ingresos (trabajo u otro tipo de ingresos fijos), si tiene patrimonio personal con el que responder, si tiene deudas impagadas, si puede aportar garantías, etc.

Una parte muy importante de este estudio de riesgo del cliente es saber, precisamente, su riesgo personal: con ello nos referimos a la financiación que ya tiene concedida.

No es lo mismo darle un préstamo a una persona que no tiene ninguna otra deuda bancaria que dárselo a alguien que está endeudado hasta las cejas. Al banco le interesa saber qué otras deudas tiene su cliente antes de darle dinero.

Publicidad de la información del CIRBE

Los datos que aparecen en el CIRBE son datos de naturaleza personal y están protegidos por la Normativa de Protección de Datos, comenzando por el artículo 18 de la Constitución.

Por ello, la información sobre una persona que se contiene en el CIRBE no es pública y sólo puede acceder a tal información el propio interesado y otras personas que tengan su autorización expresa.

Está claro que el propio interesado puede, como hemos dicho, acceder a la información que sobre él se contiene en el fichero, sólo tiene que solicitarla al Banco de España identificándose con su documentación o con un certificado electrónico (pedir nuestra información personal a través de Internet con certificado electrónico es muy sencillo).

Para solicitarla en persona debemos acudir a la sede del Banco de España (hay sedes por todo el territorio nacional) rellenando el impreso que existe para ello.

También se puede solicitar por correo adjuntando la documentación requerida a la dirección Banco de España / Central de Información de Riesgos / calle Alcalá 48 28014 Madrid.

La información solicitada se facilita de manera instantánea.

Acceso de los bancos a la información de CIRBE

Como hemos dicho, sólo el propio interesado y las personas autorizadas expresamente por él pueden acceder a esta información.

Por ello, los bancos no pueden acceder a la información de CIRBE si no tienen una autorización expresa del titular.

Normalmente, cuando solicitamos el préstamo, el banco nos hace firmar esta autorización para poder conocer nuestros datos en CIRBE.

Derechos del interesado

Son los mismos que da la normativa de protección de datos a todos los titulares de datos, es decir:

• Derecho de acceso: a conocer la información que consta sobre nosotros en ese fichero.
• Derecho de oposición: a que se utilicen nuestros datos personales para otros fines no consentidos por nosotros.
• Derecho de rectificación: a que se modifique la información cuando no responda a la realidad.
• Derecho de cancelación: a que se elimine la información cuando así deba ser (se llama derecho al olvido).