Cambista

Un cambista es aquella persona cuya actividad consiste en el cambio de divisas. Sus beneficios provienen de la diferencia entre los precios de compra y de venta de las divisas con las que comercian. La operación más común realizada por los cambistas es el cambio euro/dólar o viceversa, pero dependiendo del lugar en el que nos encontremos se utilizarán diferentes tipos de divisas.

Características principales de un cambista

• Pese a que la diferencia entre tipos de cambio genera los beneficios principales del cambista, debe tener en cuenta los gastos administrativos en los que debe incurrir para poder ejercer su oficio, siendo el más importante el alquiler del local en el que vaya a realizar su actividad.
• Es un oficio que se puede desempeñar de muchas formas. La más habitual y utilizada es trabajar en una casa de cambio, un establecimiento físico al que las personas pueden acudir y cambiar sus divisas. También es común encontrar trabajadores independientes que ejercen como cambistas en la vía pública.
• Un cambista debe mantener, en mayor parte, las divisas más utilizadas en su país, ya que serán las que más se soliciten por parte de los clientes. La principal es la divisa local, y suele ser acompañada por aquellas que más comunes sean en el mundo, como el euro o el dólar.
• Es una actividad propensa a robos y delincuencia, ya que al trabajar con elevadas cantidades de efectivo está expuesta constantemente. Por ello, la seguridad es un factor clave a tener en cuenta para todo cambista.

Cómo operan los cambistas

Generalmente, al realizar una transacción, los cambistas suelen aplicar una comisión, la cual puede mostrarse previamente o no al cliente, y que genera parte de sus beneficios. En el caso de trabajar en una casa de cambio, lo habitual es que sea la propia casa la cual establezca el porcentaje de comisión que se aplica.

Los precios de las monedas varían en los mercados internacionales todos los días, por lo que es fundamental para el cambista tener toda esta información en cuenta a la hora de realizar su actividad. En el caso de las casas de cambio, los cambistas no solo trabajan con billetes y monedas, también tienen la opción de comprar títulos en monedas extranjeras y emitirlos en divisas internacionales.

Segmentos del mercado principales que atiende un cambista

Dependiendo de si trabaja en una casa de cambio o lo hace de manera particular, un cambista trabaja con distintos segmentos del mercado:

• En el caso de las casas de cambio, tienen relación con el sector interbancario, a través del cual realizan operaciones con grandes cantidades de divisas. También lo hacen con las empresas, sobre todo en el caso de aquellas empresas exportadoras cuyos ingresos son recibidos en diferentes divisas.
• Las operaciones con personas individuales, mayoritariamente turistas, son también realizadas por casas de cambios, pero no de manera exclusiva. Los cambistas que operan de manera individual se dirigen también a este tipo de segmento, por lo que las operaciones con este tipo de clientes son muy comunes.

Historia de los cambistas

El oficio de cambista se originó en la Edad Antigua, siendo utilizado desde entonces para intercambiar monedas de diferentes regiones, y se mantuvo durante la Edad Media, donde cada vez se realizan más transacciones entre diferentes comerciantes. Se empezó a conocer como banqueros a aquellas personas que intercambian las monedas, incluso llegando a abrir depósitos para aquellos que tuviesen que viajar. Por ello, se considera que el oficio de los cambistas está muy relacionado con el de la banca.

Tanto para empresas e instituciones financieras como para personas corrientes, es necesaria la existencia de una empresa o individuo que se dedique al cambio de divisas. Por ello, los cambistas son piezas fundamentales tanto para el sector económico y empresarial como para el turístico.