Calidad financiera
Se dice que aquella empresa capaz de obtener beneficios de manera continuada durante un largo periodo de tiempo tiene una elevada calidad financiera. Por tanto, se puede definir la calidad financiera como la capacidad que tiene una organización de aprovechar de manera eficaz sus recursos para conseguir resultados positivos en los próximos años.
Factores a tener en cuenta para mantener una buena calidad financiera
Cuando una empresa se plantea su situación financiera, debe saber que la clave para mantener los buenos resultados se encuentra en mantener un alto nivel de calidad financiera. Esto se consigue cuidando numerosos aspectos, siendo los más importantes:
- Mantener los fondos propios por encima del nivel de deuda.
- Apostar por inversiones seguras y rentables en el largo plazo.
- Conseguir una salud financiera buena y rentable a lo largo del tiempo.
- Reducir la cantidad de intereses hasta un punto en el que no sea representativo para el resultado del ejercicio.
- Optimizar el ratio rentabilidad-riesgo.
No obstante, pese a la importancia de todos estos factores, hay ciertos ratios fundamentales que, si son controlados de manera adecuada por parte de la empresa, serán de gran influencia a la hora de conseguir una buena salud financiera.
Ratios de solvencia
Los ratios de solvencia miden la capacidad de una empresa para afrontar sus obligaciones financieras en el medio/largo plazo. Se pueden dividir en cuatro tipos: el ratio de apalancamiento financiero, el ratio de endeudamiento, el ratio de endeudamiento a largo plazo y el ratio de deuda. Son útiles para la empresa, ya que permiten comparar distintos factores como la deuda externa, la deuda interna o el apalancamiento, pudiendo comparar los resultados con empresas del mismo sector y tamaño.
Ratios de liquidez
Cuando las empresas quieren medir su habilidad para cumplir con sus obligaciones en el corto plazo, deben acudir a los ratios de liquidez. Hay tres tipos: el ratio de liquidez (también llamado razón circulante), el ratio de caja y el test ácido. Pese a que cada uno de ellos mide la liquidez de la empresa, deben ser utilizados de manera conjunta para conseguir un estudio más completo. Sus datos son obtenidos del balance de situación, y conviene comparar los resultados con empresas del mismo sector.
Calidad financiera y salud financiera: diferencia
Pese a que puedan parecer conceptos iguales, existe una diferencia clara entre ambos. La salud financiera hace alusión a conseguir los ratios mínimos que la permitan mantenerse, mientras que con calidad financiera se busca conseguir el mejor resultado posible, es decir, superar con mucha diferencia estos mínimos.
Cómo gestionar la calidad financiera dentro de la empresa
Teniendo en cuenta que el objetivo es administrar de forma efectiva los recursos disponibles, debemos invertir en una adecuada gestión financiera y contable. A través del gestor financiero, es decir, la persona encargada de llevar a cabo esta gestión, se planifica la estrategia a seguir por parte de la empresa, así como el control de todas las operaciones financieras que desempeñe la compañía. Una gestión adecuada permitirá a la empresa conseguir sus objetivos financieros, manteniendo una relación sana con sus inversores y minimizando cualquier tipo de riesgo, y aumentando al máximo su grado de calidad financiera.
Utilidades de la gestión financiera
Para conseguir una elevada calidad financiera, existen dos acciones fundamentales que siempre hay que llevar a cabo:
- Control de la actividad de la empresa; es fundamental detectar desviaciones importantes, comprobar que se siguen las pautas estipuladas y se cumplen los objetivos financieros.
- Detectar los errores y/o problemas y corregirlos de manera inmediata; las empresas deben solventar sus inconvenientes de manera eficaz y rápida, ya que no hacerlo permitirá a sus competidores tomar una ventaja muy valiosa.
También, mantener un control exhaustivo sobre la situación financiera de la empresa permite que tanto empleados como directivos tengan tranquilidad con respecto a la actualidad de la compañía y el trabajo realizado, así como reducir costes en tiempo y dinero a la hora de actuar ya que se precisa de una información muy completa, detallada y de alta calidad.
Calidad de crédito y calificación crediticia
Las entidades que emiten deuda poseen cierta capacidad para efectuar sus pagos en el futuro, la cual se define como calidad crediticia o calidad de crédito. Si la calidad crediticia es buena, podemos afirmar que hay poco riesgo de impago, por lo que es fundamental para la calidad financiera de una empresa, ya que ambas variables están directamente relacionadas. La calidad de crédito tiene una expresión numérica, a la cual se le denomina calificación crediticia, y asigna (a través de agencias de calificación como Moody’s o Fitch IBCA) una puntuación según la calidad financiera de la empresa.
Si las empresas quieren destacar frente a sus competidores y posicionarse como líderes en su sector, es fundamental que mantengan su nivel de calidad financiera lo más alto posible, ya que es un concepto necesario para todas aquellas organizaciones que quieran lograr la excelencia a nivel competitivo.
Black Friday 2024 (Blog)
Descuento durante 6 meses en contratos anuales.
HASTA EL 29 DE NOVIEMBRE.
En TeamSystem | Software DELSOL llevamos ya más de 30 años creando todas las herramientas que necesitas para escalar tu negocio sin complicaciones.