Tipos de competidores

Cualquier empresa del mundo tiene competencia, otra compañía que ofrece el mismo tipo de productos y está enfocada al mismo público, siguiendo la misma línea de mercado. Para reducir los riesgos al mínimo es necesario realizar un análisis completo sobre los negocios de la competencia, conociendo sus movimientos y la labor que realizan los diferentes departamentos. Es normal que se realice un seguimiento en los sectores de marketing que tienen el mismo objetivo que nosotros, llegando a conocer a sus representantes y todo lo que ofertan.

Cuando este tipo de análisis se realiza, el objetivo principal es saber cómo se mueve la competencia y tener una clara ventaja sobre ella. Sin embargo, también es importante realizar bien el resto de labores, ya que, si la empresa falla en algún otro medio, se perderán clientes. Del mismo modo, hay que estar siempre alerta de que otras empresas no utilicen la misma estrategia con nosotros.

Cuando una compañía empieza a desarrollarse, es normal que se tenga un plan estratégico para la actividad que se está realizando. ¿Y si no se tiene uno? En este caso, lo más normal es que toda la competencia te lleve mucha ventaja, por lo que es primordial que empieces a preparar tu plan cuanto antes.

Tipos de competidores

Realizado el análisis, te puedes encontrar con distintos perfiles de competidores. Son los siguientes:

Competidor rezagado 

El perfil de este tipo de competidor destaca porque sus reacciones son lentas con respecto al resto de la competencia. El resultado es que su ambiente externo tarda en aceptar los cambios de mercado que se realizan con el paso del tiempo. 

Lo idea más genérica que se tiene dentro de este tipo de organizaciones es que no tienen por qué darse prisa en reaccionar, ya que tienen una gran parte del mercado y sus clientes son leales a ellos. También puede ser porque se encuentran en un análisis más exhaustivo que requiere una mayor cantidad de tiempo, donde se evalúan toda clase de movimientos que la competencia realiza. En este caso, hay que tener en cuenta que alcanzará sus objetivos y se pondrá al mismo nivel que el resto de la competencia un poco más tarde, aunque lo hará con más recursos. 

Competidor selectivo 

Un competidor que reacciona ante algunas acciones que realiza la competencia y se queda pasivo ante otras. Por norma general, no dispone de un plan extremadamente elaborado en el que dicte cómo reaccionar ante cada situación. Se valoran mucho los aspectos más importantes de su compañía y los tiene en cuenta para decidir cuándo avanzar. 

Normalmente reacciona ante la variación de precios que se realiza en el mercado de los productos y/o servicios que oferta, aunque también puede darse el caso de que espere con impaciencia los incrementos publicitarios, ya que así el riesgo al que tiene que acogerse es menor. 

Competidor tigre

Como su propio nombre indica, hay que tener cuidado con este tipo de competidores, ya que destacan por saber responder con rapidez ante las situaciones que consideren invasivas con sus propios propósitos empresariales. Puede definirse como una acción defensiva, y utilizará todos los medios a su alcance mediante procesos muy estudiados y elaborados para ganar todas las batallas. 

El protocolo para reaccionar ante cualquier acción de la competencia está muy elaborado. Siempre sabrán en todo momento a qué tienen que atenerse y cómo enfocar sus batallas. El objetivo principal es mantenerse siempre por encima de la competencia, evitando que sus productos y servicios se copien. Si detecta una debilidad en la competencia, también actuará para explotarla al máximo. 

Competidor aleatorio

No existe ninguna conducta que defina a este tipo de competidor, ya que realiza acciones imprevisibles. Por este motivo, siempre hay que andarse con ojo, ya que es casi imposible deducir con exactitud en qué momento intentará presentar batalla en el mercado.

Uno de los aspectos que tiene esta conducta aleatoria, es que no se puede realizar un plan exacto en el que diga cómo actuar ante las diferentes acciones, ya que no sabes cuándo se realizarán ni cómo serán. Es un competidor con el que hay que tener mucho cuidado y estar siempre atentos a los movimientos que realizan. 

Selección de competidor

Toda dirección de empresa tiene que saber cuáles son sus competidores y los motivos que los llevan a realizar sus acciones. Este tipo de decisiones están basadas en los análisis que se realizan, donde se indican las fuerzas y debilidades que presenta toda compañía teniendo en cuenta a su competencia correspondiente.