¿Cómo ser entrenador personal?

La preocupación por el bienestar y la salud es cada día más importante en una sociedad con más ganas de cuidarse, alimentarse bien y, sobre todo, tener una buena forma física. Si te gusta el deporte y quieres hacer de tu hobby tu profesión, te enseñamos cómo ser entrenador personal y convertir esas habilidades físicas en la mejor oportunidad de explotar al máximo tu potencial en forma de beneficio. ¡Toma nota!

Cómo ser entrenador personal: ¿necesito estudios?

Un buen entrenador personal tiene que estar preparado. Esta es una de las controversias que surgen hoy en día: el intrusismo en esta profesión es algo con lo que hay que luchar, pues no basta con ser alguien preparado físicamente o un modelo de gimnasio para ejercer esta profesión adecuadamente. Para ello, es interesante saber que el gobierno no exige una formación específica, pero se está luchando para que, al menos, se demuestre que se ha ejercido durante más de 600 horas en centros deportivos. No obstante, a día de hoy, la titulación que más se acerca a la profesión de entrenador personal es la del Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, o su equivalente anterior de Licenciatura en Ciencias de la Actividad Física. Estos estudios implican conocer contenidos como los siguientes:

• Entrenamiento.
• Fisiología.
• Anatomía.
• Nutrición.
• Biomecánica
• Psicología
• Desarrollo motor.

También existe la vía no universitaria, mediante la Formación Profesional de Actividades Deportivas, para los que pueden otra aquellas personas que solo dispongan de la ESO en igualdad de condiciones. Incluso hay una gran variedad de ofertas en formación desarrollada en catálogos de Cursos de Entrenador Personal Avanzado que capacitan no solo para trabajar en España, sino que homologan para hacerlo en la Unión Europea. En todo caso, se exige un mínimo de conocimientos, incluidos en el grupo de instructores básicos, para desempeñar la actividad de manera profesional.

Pero ¿qué servicios ofrece un entrenador personal?

Un entrenador personal ofrece sus servicios en relación con las necesidades de su cliente, por lo que habrá tantas combinaciones y diseños de servicios como requerimientos especiales. Por eso, el entrenador personal debe tener como objetivo ayudar el rendimiento de su cliente, lograr su mejor forma física y conseguir su bienestar, en función de sus capacidades y aptitudes. El servicio será un éxito si consigues cumplir la meta de tu cliente, junto a él, no por encima ni por debajo, sino a su lado, acompañándole:

• Diseñando un plan de ejercicios personalizado.
• Estudiando su condición física y renovando dicho estudio a diario.
• Enseñando a trabajar correctamente, y si usa maquinaria, el correcto uso de las mismas.
• Motivando.
• Alabando sus logros.
• Formando y orientando su nutrición.
• Enseñando y dando las herramientas para que vea que podrá hacer lo que le enseñas cuando tú no esté. Dándole autonomía.

Tip del personal trainer top: si ofreces comodidad, recibirás adherencia. Conviértete en el garante de su seguridad y ganarás tu estabilidad.

Lugares en los que puede trabajar un entrenador personal

Ya que estás preparado y lo que quieres es empezar a tener clientes, debes tener en cuenta que puedes captarlos en numerosos lugares y de distintos modos. Cada uno de ellos te reportará más o menos beneficios y supondrá más o menos gasto energético para ti mismo. Recuerda, ¡tú no eres una máquina! Piensa en los siguientes espacios en los que poder empezar a ejercer tu profesión de entrenador personal:

• En un gimnasio: es el sitio de trabajo por excelencia de los entrenadores personales. Permite que todos los usuarios de la sala te vean trabajar y observar a la competencia. No así, puede convertirse en una jornada llena de excesiva visibilidad, interrupciones y juegos de enfrentamientos que puede resultar agotadora.
• En un estudio especializado de entrenamiento personal: se trata de centros abiertos por el propio entrenador. Es una buena opción para emprendedores autónomos y que ofrece un alto grado de intimidad y privacidad, así como mayor margen de gestión, diseño y capacidad de trabajo para ti como profesional.
• En un hotel: implica un flujo muy cambiante de huéspedes, probablemente que no hablen español, a la que tendremos que adaptarnos casi a diario, por lo que la continuidad cae de manera irremediable.
• En cruceros: es tu mejor opción si, además de entrenar a personas que lo necesitan, te gusta viajar. Se trata de una experiencia con mucha visibilidad, gran facturación, pero con unos horarios exigentes y condiciones que, si bien en un principio pueden parecerte divertidas, pueden resultarte demasiado exigentes. Pero quizá tu destino sea el de pasarte la vida trabajando a bordo de un barco… Atrévete a probar.
• En empresas: trabajar para una empresa es más cómodo y más fácil. Los clientes vienen ya dados por esta, que también asume los costes y el espacio. Tu salario está asegurado y tienes un horario relativamente estable.
• En parques.
• A domicilio.

Ahora que ya sabes cómo ser entrenador personal, solo tienes que elegir la mejor manera en la que quieres ejercer tu profesión y empezar a trabajar, teniendo en cuenta que la relación con tu cliente siempre será fundamental para que el éxito de los dos sea la única meta.