¿Cómo liderar correctamente un equipo de trabajo en remoto?
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La pandemia ha traído más consecuencias negativas que positivas a las empresas, pero ha puesto de relieve un aspecto que muchos no veían (o no querían ver): que el teletrabajo es posible y puede llegar a ser más productivo que el presencial. Vamos a desgranar los puntos que hay que tener en cuenta para liderar a un equipo de trabajo en remoto y aprovechar al máximo el voto de confianza que se le está dando a esta modalidad, aun a pesar de las circunstancias que lo han fomentado.
El trabajo en remoto: de lo utópico a lo cotidiano
El teletrabajo se ha incorporado a las vidas de miles de directivos y empleados con una fuerza inusitada hasta el momento: el confinamiento total de la población, que tuvo lugar durante la primavera de 2020, obligó a cerrar escuelas y negocios, y a trasladar la actividad de las oficinas a los hogares.
Ante esta situación, muchas organizaciones tuvieron que ponerse rápidamente al día para optimizar sus sistemas y adaptar sus procedimientos a esta nueva forma de trabajar. Según el Instituto Nacional de Estadística, solo un 22 % de las empresas españolas cuenta con programas de teletrabajo, constatando la existencia real de la brecha digital.
No habiéndose restablecido aún la antigua configuración de presencialidad en el trabajo (al menos, tal y como la conocíamos hasta el inicio de la pandemia), parece ser que el trabajo en remoto ha venido a quedarse entre nosotros por tiempo indefinido o, al menos, durante la famosa "nueva normalidad".
El teletrabajo, una modalidad cada vez más demandada por los empleados
Quizá la pandemia haya acelerado lo inevitable, porque lo cierto es que los datos que arroja el trabajo en remoto en cuanto a productividad solo constatan beneficios: según el INE, los trabajadores son un 25 % más productivos desarrollando sus funciones en remoto que presencialmente.
Los empleados ya percibían la idea de que el teletrabajo podía ser bastante más productivo que el trabajo presencial, incluso antes de que estos datos reforzasen tal postura; las generaciones más jóvenes, que han crecido en plena era digital, demandan la posibilidad de teletrabajar a la hora de incorporarse a una nueva vacante.
Incluso los empleados no tan jóvenes, pero que presentan una mayor adopción de las herramientas digitales, también se adhieren a la tendencia de preferir puestos de trabajo donde se teletrabaje siempre que sea posible.
Claves para liderar eficazmente un equipo de trabajo en remoto
A la luz de esta realidad, parece obligatorio que los directivos y los mandos intermedios sepan cómo gestionar adecuadamente a sus equipos en modalidad de teletrabajo, ya que esta tendencia, lejos de invertirse, probablemente alcanzará cotas mayores con el paso del tiempo.
Una comunicación eficaz
Una de las principales ventajas de la presencialidad es la facilidad para comunicarse: muchas personas todavía se muestran reticentes a fiar la eficacia de las comunicaciones a un canal telemático o telefónico, alegando que es más difícil entenderse si se sustituye una conversación o una reunión en persona por la estrictamente escrita, o por sus homónimas a través de canales digitales.
Sin embargo, parece contraproducente escudarse en este argumento para torpedear o menospreciar el teletrabajo, ya que, para bien o para mal, nos encontramos en una era donde las personas estamos hiperconectadas, y disponemos de más canales que nunca para compartir información, vernos mientras hablamos (uno a uno o en grupo) y mandarnos mensajes instantáneos.
Distribuir equitativamente las tareas
Otra tendencia que ha traído consigo el teletrabajo es el prolongamiento de las jornadas laborales, a pesar de las herramientas de control horario y el derecho a la desconexión digital (el requerimiento de la empresa a comunicarse con un trabajador fuera del horario laboral).
El responsable del equipo debe velar porque los empleados no tengan sus jornadas sobrecargadas, análogamente a lo que sucedía dentro de la oficina, donde se tenían más en cuenta los horarios de entrada y salida.
Fomentar el teambuilding
El teambulding es un conjunto de actividades que están destinadas a fortalecer los lazos personales de un grupo: es cierto que con el teletrabajo se pierde la calidez del trato interpersonal (para lo bueno y para lo malo), por lo que una buena gestión de equipos de trabajo en remoto debería incluir acciones que acerquen a los empleados y a los responsables entre sí, como encuentros presenciales eventuales que permitan intercambios de ideas dentro de un entorno distendido.
Promover el feedback
Al dejar de "vernos las caras todos los días", es posible que los responsables pierdan la visión de cómo se sienten sus empleados con respecto a la empresa, y que estos a su vez se involucren menos: será crucial mantener al día a los trabajadores de las acciones y las políticas corporativas, y hacerles partícipes del día a día de la organización.
El teletrabajo es, sin duda, el futuro inmediato de todas las profesiones del mercado laboral que precisan solo de ordenadores, teléfonos y conexiones a Internet para desarrollarse: ahora es el mejor momento de demostrar sus beneficios, y para ello es necesario gestionar apropiadamente a los equipos de trabajo en remoto.